Las transacciones irreversibles en Bitcoin (y en cualquier otra criptomoneda) son una función que sin dudas protege a los usuarios ante cualquier inversión que hagan. Por lo tanto es uno de los elementos responsables de que BTC siga siendo la criptomoneda más confiable y rentable del mundo.
Si eres usuario de esta criptodivisa, te conviene dominar todo lo que implica una transacción irreversible. Por fortuna, no tendrás que tomarte la molestia de buscar la información por tu cuenta, ya que aquí la hemos resumido de la mejor forma para tu comodidad.
Las transacciones irreversibles son un tipo de movimiento realizado con la criptomoneda BTC que no acepta inversiones ni devoluciones. Es decir, una vez realizadas no pueden ser canceladas por nadie.
Se trata de una de las características esenciales del Bitcoin y, por extensión, de todas las demás criptomonedas, dado que no están reguladas por un órgano central que pueda acceder a ellas e invertir un pago ya efectuado y confirmado.
La noción de ser irreversible puede aplicarse básicamente a todas las transacciones hechas en la blockchain de BTC.
Si bien establecimos que las transacciones irreversibles son precisamente imposibles de devolver, sucede que existen algunas que, por ser débiles, están expuestas a hackeos que sí pueden poner en duda su condición.
Estamos hablando de aquellas transacciones que han recibido una sola confirmación en la blockchain de Bitcoin por los mineros. Las mismas, a pesar de estar confirmadas y agregadas a la cadena de bloques, poseen un cierto nivel de vulnerabilidad.
No obstante, para que alguien pudiese penetrar esa debilidad hace falta que cuente con un poder computacional bastante elevado y costoso que evidentemente no está al alcance de cualquier persona. Eso disminuye bastante el riesgo.
Pero de todos modos existe un modo de estar seguros de que las transacciones irreversibles de Bitcoin son totalmente válidas.
El método consiste en que esperes a que tu transacción reciba al menos 5 confirmaciones. Con esa cifra ya es plenamente seguro que el movimiento es irreversible.
Esa misma estrategia puede usarse con muchas otras criptodivisas. Aunque, claro está, el número de confirmaciones variará de acuerdo con cada una.
Como señalamos anteriormente, las transacciones irreversibles son prácticamente invulnerables. Pero dentro del margen de debilidad existe un conjunto de ataques distintos que pueden usarse en tu contra. Conócelos y estarás informado a la hora de actuar:
Este primer tipo puede suceder muy fácilmente si tu transacción no ha sido confirmada ni una sola vez todavía.
El Race Attack consiste en que un mismo número de bitcoins es utilizado para realizar dos transacciones diferentes, esto es, un envío de fondos a dos personas simultáneamente.
Pero ocurre que de ambas solo una recibirá el depósito. Esto porque el hacker en cuestión hará que la transacción fraudulenta tenga una comisión mayor, por lo que será confirmada antes que la original que has hecho tú.
Una buena manera de que te protejas contra este ataque es que desactives todas las conexiones entrantes durante la transacción. Simplemente elige conexiones salientes específicas y rechaza las demás. No es un truco infalible, aunque ha ayudado a muchos.
Este segundo tipo suele ser llamado “Ataque de Vector 76”. Se trata de una estratagema que consiste en que el hacker en cuestión vulnere tus transacciones mientras tienen una sola confirmación.
Al hacer eso, tienen un acceso total a tus fondos, por lo que pueden usarlos dos veces para enviarlos a otra dirección.
Este es un ataque más común que el anterior. Sin embargo, puedes tomar las mismas precauciones que con el Race Attack respecto a las conexiones entrantes. Es igual de eficaz e incluso hasta mejor, ya que este ataque es más fácil de contrarrestar que el anterior.
Una transacción irreversible puede llegar a resultar altamente beneficiosa para ti. Hay muchas razones, pero la principal es que pueden evitar toda clase de fraudes.
Los mismos suelen verse en las monedas tradicionales cuando una persona invierte un movimiento que ha hecho para la cancelación de un producto o servicio.
Para solventar esa situación se ha procurado recurrir al servicio de terceros que operen como mediadores de ambas partes y verifiquen que ninguna intenta estafar a la otra. Aunque desgraciadamente esto conlleva una consecuencia, que es una tarifa extra en el precio.
Es así como se vuelve necesario un sistema que trabaje automáticamente sin que eso redunde en tus ganancias o en tus inversiones.
Eso es precisamente lo que hacen estas transacciones. Si eres un comerciante no tendrás que colocarles un recargo a tus clientes, y si eres comprador no deberás pagar comisiones por fraudes.
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